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miércoles, 9 de octubre de 2024

 PURÉ DE ARVEJAS

(cuentos)

Jacqueline Sellan Bodin


Este es uno de los cuentos que aparece en esa antología.

I.A


Nouilles aux fines herbes.

 

             A mi querido amigo Jaime Silva

in memoriam.

 

Jaime pasaba por un período de pobreza, uno de tantos, matizado con otros de opulencia, como es habitual en casi todos los que nos dedicamos al arte en cualquiera de sus manifestaciones. Llevaba ya tres meses sin percibir sueldo ni honorarios de ninguna especie, y, mientras esperaba que estuviera a punto el estreno de su última obra, sus pocos ahorros estaban tocando fondo.

Pero eso no influía en su hospitalidad ya que nuestra amistad podía soportar esos reveses de fortuna. La mía también andaba del revés por esos días. Así que me invitó a almorzar.

Era un domingo, de esos aburridos y soleados domingos de Santiago a medio día.

Cuando toqué a la puerta me salieron a recibir cuatro miniaturas de gato entre garras, carreras locas y saltos de acróbatas.

-          ¡Me tienen loco! – fue su grito de bienvenida – me destruyen todo, he tenido que retirar todos los adornos de las repisas.

Yo saqué cuentas: cuatro… no eran nada al lado de los diez que paseó en su auto a todo lo ancho y largo de España en los años del éxito y del exilio. Así que sonreí  diciéndole:

-          Son bonitos.

-          Ah, sí, ¡son hermosos!- y se lanzó en un verdadero ditirambo acerca de los gatos que duró una buena media hora.

De pronto, ahogando una exclamación, corrió a la cocina.

La olla donde hervían los tallarines se estaba derramando. Levantó la tapa, mordió una pasta, aprobó con la cabeza, apagó el gas y se llevó la olla hasta el lavaplatos donde tenía ya preparado un colador plástico de tres patas.

-          Hace una semana que como fideos - me confió - al aceite, a la mantequilla…

Traía la fuente de tallarines humeantes, relucientes de aceite, verdes de perejil.

La depositó sobre la mesa igual que el cocinero del rey presentando un ciervo relleno:

-          Nouilles aux fines herbes – anunció.

El aroma del perejil flotó a nuestro alrededor. En la jarra llena de agua clara, algunas gotitas pegadas al borde lanzaban destellos irisados.

En silencio religioso, nos sentamos a la mesa con la    sensación de asistir a un banquete.

                        2012.




Octubre del 2019, en la presentación del libro de cuentos "Puré de arvejas", en las dependencias de la biblioteca virtual de Zitácuaro.

 

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