La palabra escrita nos sitúa en la eternidad.

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sábado, 12 de octubre de 2024

 


Almas de pez.

(poemario)


I


¿Es que nunca dejarán de soplar

estos áridos vientos?

Un reloj que bate sus horas al vacío,

un corazón pegado a las paredes,

y las hojas del pensamiento

barridas por la tormenta.

¿Nada abrirá los ojos ciegos?

¿Ninguna luz anidará

entre estas ruinosas escamas?

Almas de pez tienen los hombres,

almas de pez o de esponja,

o de pulpos,

o de mariscos muertos

abiertos en la playa.


Jacqueline Sellan Bodin


I.A.




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