La palabra escrita nos sitúa en la eternidad.

La palabra escrita nos sitúa en la eternidad.
La palabra escrita nos sitúa en la eternidad.

sábado, 19 de octubre de 2024

 


El vidrio empañado.

(Novela)

Jacqueline Sellan Bodin




"Los paseos de arena blanca bordeados de rosales que unen sus ramas superiores formando un arco oloroso y umbrío, el muro donde las madreselvas trepan asomando por el otro lado de la cerca, la lila florecida prolongando el cielo lila en el jardín y, detrás de la casa, la ramazón frondosa del pino, el banco de madera rústica donde Catalina la arrullaba entre sus brazos, así como anteriormente había arrullado a su madre, el tilo con su juego de pájaros y de viento y más allá las azaleas y el Dafne oloroso y mágico, lleno de presagios y de botones rosa, Amalia aspira el olor del jardín que abre el abanico de su primavera y alza su danza de aromas hacia el cielo, hacia el espacio sin forma donde todo vaga y se pierde; en la tierra que sangra en heridas multicolores, Amalia respira el olor del jardín abierto como un cuerpo entregado al amor, Amalia pasea por el jardín tan distinto de la casa, tan otro mundo, el único mundo en el que Amalia se atreve a ser Amalia.

......"

 (Fragmento)



No hay comentarios:

Publicar un comentario

  El olivo (cuento) En esa silla se ha vuelto a sentar. Hace una eternidad, le parece, su existencia no tiene otro objeto que el de sentar...